Todos los edificios de Guadalajara

Baldellou, Miguel Angel (catedrático de Composición de la Escuela Superior de Arquitectura de Madrid): “Tradición y cambio en la arquitectura de Guadalajara (1850-1936)”. Edición del Colegio Oficial de Arquitectos de Guadalajara. Guadalajara, 1989. Formato apaisado, de 29,700 x 21 cms. 286 páginas, y cientos de ilustraciones.

El trabajo que se toma el profesor Baldellou para analizar la evolución urbana de la ciudad de Guadalajara, y de la de sus edificios, es enorme: meticulosamente estudia la forma en que la ciudad se expande, desde su núcleo central medieval, hasta las dimensiones que alcanzó en 1936, que sin ser tampoco muy grande, sí que suponía un crecimiento especialmente cualitativo, desde ser un burgo defensivo y artesanal, a ser la sede de una corte nobiliaria,  la de los Mendoza, que llenaron su suelo de palacios, templos, conventos.

Además de la evolución urbanística, para que la aporta Baldellou numerosos y curiosos planos, estudia los edificios uno por uno, y así se constituye este libro en un catálogo de arquitecturas singulares. Uno de los aspectos más estudiados, y de los que el catedrático madrileño es auténtico especialista, es la obra del arquitecto burgalés Ricardo Velázquez Bosco, que en Guadalajara dejó su edificio más emblemático, y el conjunto de edificios que le rodean: el panteón de la familia Sevillano y López de Dicastillo, esa construcción de finales del siglo XIX en estilo ecléctico concebida, y en la que se añaden pinturas y esculturas hasta convertirla en uno de los ejemplos de la arquitectura romántica española más señalados.

El libro muestra todos los edificios singulares de la ciudad alcarreña, desde los conventos (que en el siglo XVII llegaron a sumar casi la veintena), a los hospitales, centros oficiales el Ayuntamiento, el Banco de España, y tantos otros, pero viniendo a ofrecer luego, como un gran mosaico de sorpresas, todos los edificios de vivienda particular de finales del siglo XIX y principios del XX, con referencia a sus usos, constructores, y presentando de todos ellos los planos, los alzados, en una labor de análisis documental (es el Archivo Histórico Municipal el primer intendente de los datos) y de valoración técnica. Un libro, en suma, de gran interés para los aficionados al análisis de la arquitectura moderna.